Aun ahora me sigo preguntando que paso por la cabeza del primer hombre que empezó este juego, los demás siguieron jugando aumentando la fuerza de las armas, unas estrategias cada vez más crueles, unas heridas cada vez más profundas, un corazón que late por dentro y una bala que le quita el último aliento.
Nos seguirán quitando las palabras, como los aullidos de los lobos que cada vez se oyen con menos fuerza, no han desaparecido del bosque, seres más poderosos que ellos han acallado sus llantos, nos seguirán bajando nuestro puño de acero levantado, luchando porque algún día la batalla sea blanca, que nadie nos robe nuestra libertad de elegir si nuestro país realmente quiere participar en guerras a sangre fría, empañadas de mentiras como hace ya 500 años, cuando para ahorcar a alguien no hacía falta más que un falso rumor que achicase su honor, y una cuerda alrededor del cuello, con la mirada perdida su cuerpo quedo colgando de aquel árbol como un pequeño columpio que se balancea por el tiempo, más tarde se cambio por un hacha, distintas maneras y un mismo resultado, unos ojos perdidos, y unos rezos desconsoladas, imágenes que se quedaron grabadas en la retina de aquellos que lo vivieron, y que a estas alturas se siguen repitiendo en su cabeza… el silbido, el grito y la lágrima…
Y aun ahora que vivimos en una sociedad que se cree moderna por el simple hecho de fardar de algo, vemos en las noticias los mismos resultados, la gente muere y nosotros no hacemos nada, solo opinamos en nuestra casa, con las ventanas bajadas y las puertas cerradas, y hacemos juicios sinsentido de lo que está bien o mal, juicios de moral que ni si quiera nosotros nos aplicamos… Una persona asesina a otra y se produce el mismo efecto que una muerte natural…
Reflexiona… lo imposible no es inalcanzable… únete a una lucha en el que no tiene sentido pertenecer a un partido político u otro que de nada sirve… seguiremos luchando hasta que nuestra lucha obtenga resultado… al fin y al cabo los peones en algunas partidas de ajedrez acaban ganando las batallas…
0 comentarios:
Publicar un comentario
No te olvides de enseñarme como se sueña de verdad...