Entre la mentira y la verdad...

Todo se reduce a especular... lo bueno por aquí... lo malo por allá...

Supón un concepto, cuéntaselo a aquella persona que sepas que confiará tu secreto como el más preciado valor, sabiendo que se lo contará a todo el mundo, y... ¡¡pum!! ya está... todo el mundo creerá saberlo todo de ti, aunque no tengan la más mínima idea de que todo esta preparado desde el principio como una mera demostración de que pasen los años que pasen, muy pocas personas saben guardar un secreto de verdad.

Es curioso como la gente crea supuestos y se les cree más que incluso las definiciones del diccionario, te miran, piensan, te oyen hablar y ya te conocen lo suficiente como para establecer juicios de valor que a menudo son erróneos...

Entre tu y yo... los dos sabemos que casi nadie actúa como realmente es... ¿por qué? muy sencillo... supondría una catástrofe apocalíptica, estaríamos condenados a sincerarnos y a decir lo que realmente pensamos, es más, haríamos lo que nos apeteciese sin pensar en las consecuencias...
Sí... creo que yo he llegado al matiz de mi problema... las consecuencias, el que dirán, el ahora sí, ahora no, mejor tal vez mañana...
Vivimos creyendo comernos el mundo y nos quedamos con la cuchara y sin comernos el pastel, porque la vida real no es como las películas americanas en el que los grupos de buenas personas triunfan, el amor vence cuando los protagonistas se gustan y las malas personas son castigadas con humillación... en la vida real, las buenas personas triunfan cuando las suerte les sonríe, el amor cuesta y normalmente termina en desamor, eso en el caso de que los dos protagonistas se gusten, y las malas personas terminan teniendo amigos que se sienten sometidos a no poder decir lo que piensan.

Así que no... mi vida no es una película, y nunca lo será... hablan de mi vida, día si, día no, día también, suponen que soy una victima de la sociedad que no se atreve con nada, establecen lo que me gusta o me disgusta, y se lo cuentan a los demás...
Pero te voy a contar un secreto... entre tu y yo... a veces digo la verdad cuando me siento eufórica, otras miento para que no sepan lo que realmente alberga mi corazón, a veces pienso en positivo cuando todo es negativo, otras veces simplemente no apetece pensar, me gusta liar la mente de las personas porque creo que nadie me conoce de verdad, o tal vez si... 
Así que pase lo que pase, cambie lo que cambie, todo se resume a las especulaciones, a establecer lo que está bien y lo que está mal, lo que queda entre la mentira y la verdad...

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. No somos, la mayoría de las veces.quienes realmente somos. A veces es bueno, a veces no. Es muy fácil señalar con el dedo, todos lo hacemos, todos simplificamos y a veces sin querer o queriendo, lastimamos a quienes más amamos y termina todo como en una película con un triste y real final, que las hay muchas. Pero cuando hacemos eso y lo notamos entonces debemos recapitular y procurar no hacerlo de nuevo. Así vamos creciendo como personas, nos hacemos mejores seres humanos; aunque también es cierto que hay a quienes no les importa juzgar a simple vista y cuchichear y por más que se percatan de que lo hacen mal pues adelante siguen...

Lo importante es seguir, continuar y pasar por alto a estas personas, que más se podría hacer? Darles oído es perder tiempo, esfuerzo y energías que se necesitan para cosas mejores!

Saludos.

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